Gaza: El invierno se acerca y el horror continúa sin visos de un final

“A medida que se acerca el invierno, el horror en Gaza continúa sin un final a la vista”, afirmó este lunes el coordinador humanitario adjunto de la ONU en los territorios palestinos ocupados en una nueva sesión del Consejo de Seguridad sobre la situación en ese territorio asediado, en la que urgió a un alto el fuego inmediato.

Muhannad Hadi recordó que en los más de trece meses de conflicto transcurridos desde los ataques al sur de Israel liderados por Hamas han muerto unos 44.000 palestinos y más de 100.000 han sido heridos. Los muertos israelíes y extranjeros se cifran en 1700, y 101 siguen retenidos en calidad de rehenes.

Las víctimas palestinas siguen aumentado dada la intensificación devastadora de la ofensiva en el norte de la Franja de Gaza registrada en las últimas semanas, con incidentes “alarmantemente frecuentes” que causan decenas de muertos.

“Además de la carnicería diaria, seguimos siendo testigos de desplazamientos y destrucción, incluso de infraestructura civil”, dijo Hadi, citando el desplazamiento de más de 100.000 personas del norte hacia el sur de Gaza observado a partir del 6 de octubre pasado. La ONU estima que sólo quedan 75.000 en el norte de la Franja.

El coordinador humanitario condenó nuevamente la matanza y las lesiones generalizadas de civiles en Gaza, y el desplazamiento forzado e interminable de la población.

El acceso a la ayuda humanitaria es una lucha diaria

Por otra parte, señaló que el acceso a la ayuda humanitaria sigue siendo una lucha diaria y coloca en muy alto riesgo al personal que la distribuye,

“El nivel de bienes esenciales, incluida la asistencia humanitaria, que se ha permitido entrar en Gaza es deplorablemente insuficiente para satisfacer las necesidades abrumadoras de la población”, apuntó, y agregó que, además, el saqueo de suministros de ayuda por parte de palestinos armados se multiplica y se torna más organizado y violento.

“Los ataques contra el personal y los convoyes humanitarios deben cesar de inmediato. Hay que restablecer el orden público, y la población civil debe tener acceso seguro a la ayuda vital”, enfatizó, subrayando que la supervivencia de dos millones de personas pende de un hilo.

En este sentido, instó a Israel a que cumpla sus obligaciones de facilitar el paso rápido y sin trabas del socorro humanitario a Gaza y a través de ella, y a que todas las partes respeten la prestación de asistencia en condiciones de seguridad.

Operaciones en Gaza para una posible reducción del territorio

Hadi advirtió de que a medida que la población se reduce en el norte de Gaza, las fuerzas israelíes “parecen estar despejando áreas significativas de tierra, gran parte de ellas tierras agrícolas previamente productivas, creando lo que parecen ser zonas de amortiguamiento, lo que genera preocupaciones sobre una reducción a largo plazo en el territorio palestino”.

“Al mismo tiempo, los ministros del gobierno israelí han pedido asentamientos israelíes en Gaza”, añadió.

Violencia alarmante en Cisjordania

Con respecto a Cisjordania, el coordinador adjunto alertó de que la violencia continúa a niveles sumamente preocupantes, creando una dinámica cada vez más peligrosa.

Precisó que 32 palestinos han muerto en las últimas semanas, en su mayoría durante operaciones de las fuerzas israelíes y enfrentamientos con palestinos armados que, según Israel, tienen como objetivo a grupos armados y militantes palestinos.

“Los colonos israelíes y otros civiles también continuaron atacando a las comunidades palestinas en Cisjordania muchos de ellos en el contexto de la cosecha de aceitunas, mientras que los palestinos también continuaron los ataques contra israelíes”, detalló.

La anexión viola el derecho internacional

También señaló que el gobierno israelí continúa su avance de los asentamientos y su política de desalojos y demoliciones de estructuras de propiedad palestina, y refirió que algunos ministros piden abiertamente la anexión de la Cisjordania ocupada.

“La anexión constituye una violación del derecho internacional y debe ser rechazada con firmeza”, acotó.

Del mismo modo, informó que la exención que permite al sistema bancario israelí cooperar con los bancos palestinos expirará a finales de mes, amenazando una vez más al sector bancario y a la economía palestina. “El uso de esta carta de renovación como una amenaza perpetua de inestabilidad económica, junto con otras medidas unilaterales que socavan la estabilidad fiscal de la Autoridad Palestina, debe terminar”, apuntó.

Debemos tratar a Gaza y Cisjordania como un todo

Hadi exhortó al Consejo de Seguridad y a los Estados miembros de la ONU a evitar el desmoronamiento de las instituciones palestinas y de una solución justa y duradera. “No debemos permitir que se repitan los ataques del 7 de octubre y sus secuelas; debemos tratar a Gaza y a Cisjordania como un todo, como parte integrante de la visión de un Estado palestino independiente (…) hay que preservar la Autoridad Palestina y sus instituciones; debemos crear el espacio para una solución política, no violenta”.

“Si las fuerzas que tratan de socavar la solución de dos Estados tienen éxito, el colapso de los principios y las estructuras institucionales pertinentes tendrá un efecto dominó que podría extenderse mucho más allá del Oriente Medio”, recalcó.

Para terminar, Hadi reiteró la urgencia de un alto el fuego inmediato. “Necesitamos un alto el fuego; tenemos que sacar a los rehenes, necesitamos que el apoyo vital se entregue de forma segura ahora, y tenemos que garantizar la seguridad a largo plazo de palestinos e israelíes”, concluyó.

Agudización del sufrimiento

Por su parte, la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) hizo hincapié en que las primeras lluvias de la temporada de invierno acarrean aún más sufrimiento.

“Alrededor de medio millón de personas están en riesgo en áreas inundadas. La situación solo empeorará con cada gota de lluvia, cada bomba, cada ataque”, subrayó en un tuit.

También destacó que la población gazatí está en constante peligro de deshidratación y enfermedades, ya que la escasez de combustible impide que funcionen los pozos de agua.

“Sólo en el asediado norte de Gaza, alrededor de 70.000 personas luchan por acceder a agua potable. Este derecho humano sigue estando fuera del alcance de demasiadas personas”.

La Agencia insistió en que los palestinos de Gaza entran en el invierno en condiciones atroces, sin ningún lugar seguro donde refugiarse.

“Llueve a cántaros y necesitan de todo, incluso ropa, zapatos, mantas y colchones, ya que el frío se está instalando. Esta situación desesperada debe terminar”, puntualizó UNRWA.